El pasado martes 29 de octubre tuvo lugar en Málaga la Jornada para el "Impulso al Razonamiento Matemático". En mi opinión particular, y puedo estar equivocado, su desarrollo tuvo escaso relieve. En puridad, solo se ocuparon del impulso matemático en la Educación Secundaria, olvidando los nueve cursos que constituyen la Educación Infantil y la Primaria. Una ponencia, "Resolución de problemas en Infantil" (o algo así), resultó ser un fiasco, puesto que nada se habló de ese tema, salvo un ejemplo que puso el ponente y que, sencillamente, estaba inventado. Otro ponente aprovechó para hablar de la Empresa a la que asesora, y de paso destacar al método "Singapur", etc.
Pero lo que más me llamó la atención fue la intervención de D. Agustín Carrillo de Albornoz, comprometido desde hace años en la renovación de la enseñanza matemática en la Secundaria y miembro relevante de diferentes asociaciones de renovación matemática. Me explico:
La cosa empezó mal desde el principio. El presentador no se sabía sus apellidos, y lo presento como Sánchez Albornoz. Lo confundió con el historiador, ministro, embajador, etc., que falleció hace ahora 40 años: Claudio Sánchez de Albornoz. La intervención de Don Agustín se movió dentro de las líneas metodológicas propias de una necesaria renovación de la enseñanza. Pero se pronunció con rotundidad en cuatro puntos que quiero destacar. Fueron:
1. Afirmó que la necesidad de renovación se origina en los malos resultados obtenidos por España en "PISA 2012". En realidad, debería referirse al ejercicio del año 2000, que fue la primera veza que participó España en tal evaluación internacional. Se "comió" cuatro PISAS", de las que, en una de ellas (la de 2006) ya participó Andalucía.
2. Afirmó que cinco puntos de distancia en los resultados de PISA significan la pérdida o ganancia de un curso respecto a los que los tengan de menos o de más. Otro error. Sí que se habla de "distancias medidas en cursos", que oscilan entre 20, 30 o 50 puntos, pero por personas poco formadas. Es imposible demostrar o verificar esto que a veces se proclama con tana solemnidad. Un ejemplo del disparate: la distancia entre Singapur y España, en el último PISA, es de 102 puntos. O sea, que Singapur saca a España una ventaja de...¡20 cursos! Para entendernos, Infantil, Primaria, Secundaria, Bachillerato, Grado Universitario y un Máster.
3. Hizo una abjuración solemne de la raíz cuadrada como contenido escolar, en el sentido de que los niños la realicen manualmente. Es verdad que la resolución de una raíz cuadrada con las herramientas que proporciona el cálculo tradicional es algo muy difícil. Pero, ¿y si la resolución de una raíz cuadrada se hiciera de modo distinto al tradicional y de forma que los niños la comprendieran? No contempló tal alternativa ni hubo perdón, aunque con esta alternativa se mejore el cálculo mental, se abra un nuevo campo de resolución de problemas, se trabaje el proceso inverso del cálculo de cuadrados, etc. Es de sobra sabido que en ABN sostenemos lo contrario, y son muchos los vídeos y trabajos en los que los niños hacen aquello que decimos que se puede hacer.
4. Y los más sorprendente: se deben suprimir o eliminar todos los libros de texto de matemáticas en Secundaria. Así, sin más matices. Y ello aunque también afirmara la escasa o mala preparación didáctica de bastantes de los docentes de Matemáticas en esta Etapa. Y ello, también, aunque el autor o autores de los libros fueran unos excelentes y reconocidos docentes, que trasladaran lo que ellos hacen para que les sirviera de sugerencia y modelo a aquellos que no están tan formados.
En fin. Que me quedé sorprendido de que una persona de su trayectoria tenga estos juicios tan rotundos y nada matizados. ¡Cosas veredes...!