El pasado sábado, 14 de octubre, tuvo lugar una sesión de formación, que no tuvo más remedio que celebrarse online debido a la actual pandemia, organizada por el Delegado de Anaya en Madrid, Álvaro Díaz, y dirigida a las y los docentes de la Comunidad de Madrid que siguen el método ABN y utilizan los libros de texto.
Esta jornada no es más que una continuidad de las que se han celebrado en años anteriores en Madrid, en la sede de Escuni, de manera presencial y con más de quinientas participantes. En este caso, el hecho de ser online no ha disminuido la asistencia, sino que la ha incrementado: casi setecientas seguidoras, nada menos.
Gracias a los libros de Anaya hemos podido llegar a muchos colegios, que sin ellos no hubiera sido posible. También Anaya ha puesto en marcha programas de formación que han abarcado casi todas las provincias y se han extendido, por tanto, por toda España. Han sido miles los docentes formados. La expansión en Hispanoamérica (y en los colegios españoles en el extranjero) ha tenido que ver mucho con el apoyo de la editorial, con estancias de al menos quince días en diferentes países de varios de nuestros formadores, todo ello con su patrocinio. Finalmente, y para no cansar, la colaboración de la editorial ha sido clave para que se hayan podido celebrar los seis congresos nacionales. Lo señalo porque no sé si esto lo hacen todas las editoriales.
Una última cosa. A mí me parece que lo que se ha venido haciendo en Madrid (Jornadas de Escuni) y esta jornada online es algo que no tiene precedentes. Reunir a cientos y cientos de docentes, con más de una decena de ponentes, para mejorar las competencias profesionales, creo que no lo hace nadie, elijamos como criterio el método seguido (Singapur, Entusiasmat, Math-Jump, etc) o la editorial que patrocina la actividad (Santillana, SM, Everest, etc).