Cristian, alumno de 3º de Primaria de la tutoría de Concha Sánchez del CEIP Andalucía de Cádiz, realiza un problema mediante el algoritmo ABN, en el cuál, siguiendo el método tradicional, habría una suma y una división por tres. Con él comenzamos los vídeos correspondientes a este curso.
me he quedado sorprendida con este nuevo metodo de aprendizaje, me ha encantado este video sobretodo porque el protagonista es mi hijo.
ResponderEliminarinaudito, increible yo no se de donde es este chikillo pero es un numero 1 en las matematicas, que vivan las descomposiciones¡¡¡¡¡¡¡¡¡
ResponderEliminarHola, ante todo agradecer el esfuerzo del método y sobre todo que por primera vez el niño comprende de primera mano para que quiere hacer la cuenta, pero a mi el resultado... para llegar al final a necesitado creo 7 operaciones, restas y sumas, si recordamos la división es el calculo del numero de veces que esta X en Y, lo que ha desarrollado este chaval por su propio método, si hubiera dividido le habría salido en dos operaciones simples, creo que puede ser útil para la vida diaria y para fijar conceptos, pero no para sustituir los sistemas formales.
ResponderEliminarPor cierto tengo 29 años EGB, BUP, COU (Ciencias Puras) y dos Ciclos Superiores, me encanta derivar e integrar y los limites que tienden al infinito, pero solo me gustaron después de comprendes sus usos.
Muchas gracias por su aportación, J. Daniel.
ResponderEliminarLos niños no resuelven los problemas así. Este fue un pequeño experimento para comprobar la capacidad de estimación y el manejo espontáneo de cantidades.
Si repara en los ejemplos de resolución de operaciones que utilizamos, verá que no distan mucha del formato tradicional (pensado, por cierto, para otros menesteres bastantes distintos a la educación y formación matemática de los niños). Lo que les damos nosotros es flexibilidad. No se trata de que los niños no sepan sumar o multiplicar combinando en un determinado orden unidades, decenas, centemas, etc., y calculando una de esas unidades cada vez. Se trata de ofrecer unos modelos que permitan que el que sea capaz de operar simultáneamente con varios órdenes de unidades, porque tiene una buena capacidad para el cálculo, lo haga, y que el que no la tenga pueda desdoblar el cálculo en más de un intento.
Hoy, por ejemplo, en una clase de 4º resolvían un problema en el que había que multiplicar 125 por 55. Ha habido niños que (la tabla de multiplicar la conocen hasta el 20, y llegarán hasta el 99) directamente han calculado 50 por 120 y 5 por 120. Otros no se han atrevido y han sido más tradicionales: 100, 20 y 5 han sido multiplicados sucesivamente.
Hay niños, puede ver fotos de sus cuadernos en el blog, que pueden dividir a la vez varias cifras del dividendo, o que suman de una vez millares, centenas y decenas. ¿Es esto malo? ¿Sería mejor que supieran menos? Que adquieran esta enorme capacidad de cálculo y de estimación, ¿en qué les perjudica para el futuro? ¿No será al contrario?
Por otra parte, los chicos saldrán de Primaria conociendo los algoritmos tradicionales. Ellos los encuentran simplones. Un ejemplo: un alumno de tercero divide "de un golpe" 729 entre 9 (81). Con el algoritmo tradicional sólo calcula combinaciones de dígitos, y de una manera que le impide realizarlo mentalmente. ¿Dónde están las ventajas?