Páginas

jueves, 31 de agosto de 2017

NUESTROS MEJORES DESEOS PARA EL CURSO 2017-2018.


            Mañana echa a andar el nuevo curso escolar. Un nuevo curso es una nueva aventura, algo que está sin escribir y que vamos a rellenar con más experiencia y con más conocimiento. Nuestros mejores deseos para esta nueva andadura.
            Este es el décimo curso desde que comenzó a aplicarse el ABN. En realidad, el octavo si se cuenta desde que el ABN salió del ámbito tan recogido y protector de los primeros dos años. En este tiempo se ha formado una comunidad docente que nos va a permitir afrontar las tareas del nuevo año escolar más apoyados, con más lugares a los que acudir, con más materiales y experiencias. No sabemos cómo se desenvolverá este nuevo período de tiempo. Pero pocos colectivos han puesto a disposición de los docentes tanto conocimiento y tanta ayuda como lo ha hecho la comunidad ABN.
            No hace mucho me comentaron, con cierto desdén, que no nos diéramos tanta importancia. Total, lo que hacíamos era que los niños jugaran con palitos y tapones y poco más. No me callé, claro, pero la respuesta improvisada siempre deja que desear. Me hubiera gustado tener a mano lo que dije de la enseñanza de las Matemáticas con motivo de una ocasión de cierta solemnidad. Pero hoy sí puedo traer aquí esa cita, y lo hago con la intención de subrayar de que nuestro trabajo es importante porque hacemos cosas importantes, y que nuestro trabajo es muy digno porque acrecentamos la dignidad de nuestros alumnos. Hacemos algo más que dar Matemáticas:
            “Porque no hablamos de que los alumnos aprendan matemáticas, sino de que, como dice Servais, ejerciten el juicio, de que aprendan a separar lo verdadero de lo falso, lo demostrado de lo no demostrado. Se Trata de organizar lógicamente las cabezas: ordenar ideas, reconocer hipótesis, consecuencias, causas, medios, ocasión, efectos. Se trata de ponerlos en el camino de arribar a la objetividad, a la precisión, al gusto por lo objetivo: en definitiva, de llegar al método científico. No se trata de aprender matemáticas, sino que esta sea el instrumento para que el alumno aprecie la armonía y se sepa expresar con ella. No se trata solo de descubrir y apreciar las simetrías, proporciones, formas y relaciones en la arquitectura, la pintura, la escultura, etc., sino también de conseguir la expresión mental de la belleza y la sencillez: algo tan difícil como saber expresarse con concisión, claridad, orden y elegancia. En muchas ocasiones se desdeña el papel de las matemáticas en la educación moral. Pero de educación moral hablamos cuando se trata de inculcar el cuidado de conocer y comprender los principios de las cosas, los fundamentos, los a priori, de establecer el hábito de investigar las preguntas y las justificaciones, de no quedarse con la explicación fácil. También hablamos de educación moral cuando se trata de crear probidad y lucidez acerca de sus propias observaciones, opiniones y deducciones formales. Y también hablamos de educación moral, finalmente, cuando la voluntad consigue reforzar la capacidad de atención, de concentración y de esfuerzo.”     
            Como veis, no es poca cosa la que traemos entre manos. Mañana será el primer día del resto del curso. No hay tiempo que perder. ¡A POR ÉL!


No hay comentarios:

Publicar un comentario